El frío de la mañana no fue impedimento para que los alumnos de cuarto año medio del liceo Gregorio Cordovez tomaran una y otra vez distintos recipientes con agua, midiendo el volumen de los cuerpos geométricos.
De esta manera, salieron del aula dejando atrás las guías y fórmulas matemáticas para aprender in situ la geometría.
Esta metodología innovadora es liderada por el profesor de matemáticas Marcelo Osses, quien está convencido que se aprende mejor jugando, “ellos integran más los contenidos de esta manera, van aplicando estos contenidos vistos en la parte teórica. Ya no estamos sentados en clases resolviendo ejercicios, sino que vamos haciendo la asignatura más lúdica, más práctica, pues la idea es que ellos también jueguen con lo que vemos en clases”.
Son cinco módulos en que todos los alumnos del curso agrupados en 5 estudiantes van rotando en cada uno de ellos, registrando sus resultados. El primer módulo consiste en crear un mapa conceptual con todos los contenidos, el segundo es aplicar fórmulas de cuerpos geométricos, el tercero, se trata de medir la capacidad de los cuerpos geométricos en base al agua y determinar cuál de estos tienen el mismo volumen, el cuarto módulo es realizar ejercicios basados en los contenidos de la Prueba de Selección Universitaria PSU y el último, calcular el volumen con bloques de madera.
Tendidos en el piso, dividiéndose las funciones y anotando sus resultados, los alumnos se divierten con este estilo de aprendizaje para comprender mejor los sólidos de revolución y cuerpos geométricos que, tiene una evaluación que corresponde al 50 por ciento de una nota la que después se complementa con una evaluación escrita.
GEOMETRÍA EN SUBTERRANEO
El subterráneo del liceo Gregorio Cordovez es un lugar muy particular que gustan visitar sus alumnos. Fue justamente escogido por el profesor Marcelo Osses para realizar allí un taller de matemáticas destinado a los terceros medios.
Se trata de geometría plana que mediante dinámicas de grupos permite reforzar los contenidos aprendidos en clases, “la idea es que los jóvenes trabajen con elementos concretos y se familiaricen con las figuras de geometría, con elementos de lógica matemática, que comprendan por ejemplo que es un triángulo equilátero y que con la sopa de letras también manejen contenidos que son importantes, enlazamos toda la materia de geometría”, puntualizó Osses.
El aprendizaje de la clase se practica en terreno y se relaciona con los contenidos PSU, para desarrollar habilidades de cálculo y geometría. Los alumnos son capaces de organizarse y resolver las interrogantes.
De esta manera y con el cambio de enseñanza en las matemáticas, los jóvenes liceanos logran un aprendizaje más profundo desarrollando también otras habilidades.